Cuando un punto final no viene muy valiente, se hace acompañar de otros dos que van de la mano.
Y el FINAL que debía de ser se convierte en otra cosa. Los puntos suspensivos suelen preceder a todas las palabras importantes.
Es que algunos no somos tan valiente como para decir listo hasta acá llegue no quiero mas esto y poner un PUNTO FINAL.
No lo hacemos seguimos metiendo PUNTOS SUSPENSIVOS, y la cosa sigue y sigue, nos complican ,hasta que llegue el momento en que no lo podamos manejar y pasa lo que tenga que pasar.
Lo pensamos si,eso seguro, de ahí a hacerlo no. Te dejas llevar, te haces mal, no queres caer en la realidad, esto se trata de vos, esto se trata de parar. Si no sabes poner un Punto Final a aquellas cosas que NO te hacen bien y no te dejan continuar, nunca vas a poder tener esa tranquilidad que tanto buscas.
Deja los puntos suspensivos...
Y pone un Punto Final.
